Conmemoración de
todos los fieles difuntos
Ante la muerte de un ser querido podemos creer que Dios nos ha abandonado. Podríamos pensar que si Él hubiera estado a nuestro lado no se habría producido este desenlace. A menudo lo culpamos de lo que ha sucedido y le reprochamos que no haya hecho nada para impedir la tragedia. Sin embargo, la actitud de Jesús en Betania nos muestra cómo este
sentimiento no deja de ser una trampa que oculta el
verdadero rostro misericordioso de Dios. Jesús acompaña a la
familia de Lázaro en el dolor y la tristeza que
sienten por la pérdida de su hermano. Como Marta,
seguramente nosotros también quisiéramos que Dios
hiciera el milagro de devolver a la vida a nuestros
difuntos, para poder disfrutar de ellos unos
cuantos años más. En cambio, Jesús nos ofrece
algo mucho mejor: la Resurrección. Una nueva forma de existencia que no
está sometida al imperio de la muerte. Quienes crean en Él y
lo reconozcan Resucitado en medio del mundo, también serán capaces de descubrir la comunión espiritual
con sus difuntos. Entonces, se cumplirá la promesa de que no morirán
nunca más (Misa Claret).
Galería de fotos
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.