El
Paráclito, que enviará el Padre, será quien os lo enseñe todo.
Comentario:
El
Espíritu Santo que animaba la acción de los primeros cristianos, como se nos
cuenta en la primera lectura, nos enseña las verdades esenciales de nuestra fe,
nos descubre verdaderamente el amor de Dios a los hombres. El Señor nos promete
que si guardamos su palabra él vendrá a nosotros. Acojamos al Señor en nuestra
vida y pidámosle al Espíritu Santo que nos dé la fuerza para llevar a Dios a
los demás.
Del Papa Francisco, 275, 280:
Si pensamos que las cosas no
van a cambiar, recordemos que Jesucristo ha triunfado sobre el pecado y la
muerte y está lleno de poder. Jesucristo verdaderamente vive. De otro modo, «si
Cristo no resucitó, nuestra predicación está vacía» (1 Co 15,14). El Evangelio
nos relata que cuando los primeros discípulos salieron a predicar, «el Señor
colaboraba con ellos y confirmaba la Palabra» (Mc 16,20). Eso también sucede
hoy. Se nos invita a descubrirlo, a vivirlo. Cristo resucitado y glorioso es la
fuente profunda de nuestra esperanza, y no nos faltará su ayuda para cumplir la
misión que nos encomienda
Para mantener vivo el ardor
misionero hace falta una decidida confianza en el Espíritu Santo, porque Él
«viene en ayuda de nuestra debilidad» (Rm 8,26). Pero esa confianza generosa
tiene que alimentarse y para eso necesitamos invocarlo constantemente. Él puede
sanar todo lo que nos debilita en el empeño misionero.
“Por tu pasión y muerte en cruz, bendito
Cristo de Ourense, ampáranos en la vida y en la muerte”. Pidamos al Santo
Cristo de Ourense por nuestras intenciones y por las intenciones de toda la
Iglesia (breve silencio).
Oración:
Oh Dios, que quisiste que tu amantísimo Hijo sufriese por nosotros el
suplicio de la Cruz para arrojar de nosotros la tiranía del enemigo, concédenos
a tus siervos, conseguir la gracia de la Resurrección. Por Cristo Nuestro
Señor. Amén.
El
que permanece en mí y yo en él, ese da fruto abundante.
Comentario:
Nuestro
ser cristiano se verá por los frutos de santidad que demos, para ello se
requiere estar unidos a la vid, que es Cristo. Estaremos unidos a él si
cumplimos el mandamiento del amor, a Dios y a los demás. Por la participación
en la Eucaristía nos unimos a él y nos da la fuerza suficiente para mostrarlo
con nuestras buenas obras.
Del Papa Francisco. E.G. 48,88:
Si la Iglesia entera asume
este dinamismo misionero, debe llegar a todos, sin excepciones. Pero ¿a quiénes
debería privilegiar? Cuando uno lee el Evangelio, se encuentra con una
orientación contundente: no tanto a los amigos y vecinos ricos sino sobre todo
a los pobres y enfermos, a esos que suelen ser despreciados y olvidados, a
aquellos que «no tienen con qué recompensarte» (Lc 14,14).
El Evangelio nos invita
siempre a correr el riesgo del encuentro con el rostro del otro, con su
presencia física que interpela, con su dolor y sus reclamos, con su alegría que
contagia en un constante cuerpo a cuerpo. La verdadera fe en el Hijo de Dios
hecho carne es inseparable del don de sí, de la pertenencia a la comunidad, del
servicio, de la reconciliación con la carne de los otros. El Hijo de Dios, en
su encarnación, nos invitó a la revolución de la ternura..
“Por tu pasión y muerte en cruz, bendito
Cristo de Ourense, ampáranos en la vida y en la muerte”. Pidamos al Santo
Cristo de Ourense por nuestras intenciones y por las intenciones de toda la
Iglesia (breve silencio).
Oración:
Oh Dios, que quisiste que tu amantísimo Hijo sufriese por nosotros el
suplicio de la Cruz para arrojar de nosotros la tiranía del enemigo, concédenos
a tus siervos, conseguir la gracia de la Resurrección. Por Cristo Nuestro
Señor. Amén.
Los
hechos de los Apóstoles nos hablan hoy de cómo se iba difundiendo por todas
partes la palabra del Señor. También nosotros, como iglesia de Ourense, estamos
realizando un Sínodo para ver cómo acercar la palabra del Señor a todas partes.
Queremos mostrar el rostro de Dios, que es amor, a todos; su imagen más
perfecta es la de Cristo crucificado por amor a los hombres. Empapémonos de él
y transmitámoslo a los demás
Del Papa Francisco. E.G. 37,38:
Una pastoral en clave
misionera no se obsesiona por la transmisión desarticulada de una multitud de
doctrinas que se intenta imponer a fuerza de insistencia. Cuando se asume un
objetivo pastoral y un estilo misionero, que realmente llegue a todos sin
excepciones ni exclusiones, el anuncio se concentra en lo esencial, que es lo
más bello, lo más grande, lo más atractivo y al mismo tiempo lo más necesario.
La propuesta se simplifica, sin perder por ello profundidad y verdad, y así se
vuelve más contundente y radiante.
El Evangelio invita ante todo
a responder al Dios amante que nos salva, reconociéndolo en los demás y
saliendo de nosotros mismos para buscar el bien de todos. ¡Esa invitación en
ninguna circunstancia se debe ensombrecer!
“Por tu pasión y muerte en cruz, bendito
Cristo de Ourense, ampáranos en la vida y en la muerte”. Pidamos al Santo
Cristo de Ourense por nuestras intenciones y por las intenciones de toda la
Iglesia (breve silencio).
Oración:
Oh Dios, que quisiste que tu amantísimo Hijo sufriese por
nosotros el suplicio de la Cruz para arrojar de nosotros la tiranía del
enemigo, concédenos a tus siervos, conseguir la gracia de la Resurrección. Por Cristo Nuestro Señor. Amén.
Ante
las dificultades en nuestra vida, ante el dolor, ante la incertidumbre, ante
las decisiones difíciles, levantemos la mirada a Cristo crucificado; Él es el
camino, la verdad, la vida. En este tiempo de Sínodo diocesano dirijamos
nuestra mirada al Señor, él nos enseñará qué caminos tomar, cuáles son las
verdades fundamentales que nos dan una vida plena.
Del Papa Francisco. E.G. 24: D.
La Iglesia en salida es la
comunidad de discípulos misioneros que primerean, que se involucran, que acompañan,
que fructifican y festejan.
La comunidad evangelizadora
experimenta que el Señor tomó la iniciativa, la ha primereado en el amor (cf. 1
Jn 4,10); y, por eso, ella sabe adelantarse, tomar la iniciativa sin miedo,
salir al encuentro, buscar a los lejanos y llegar a los cruces de los caminos
para invitar a los excluidos. Vive un deseo inagotable de brindar misericordia,
fruto de haber experimentado la infinita misericordia del Padre y su fuerza
difusiva. ¡Atrevámonos un poco más a primerear!
Como consecuencia, la Iglesia
sabe «involucrarse». Jesús lavó los pies a sus discípulos. El Señor se
involucra e involucra a los suyos, poniéndose de rodillas ante los demás para
lavarlos.
“Por tu pasión y muerte en cruz, bendito
Cristo de Ourense, ampáranos en la vida y en la muerte”. Pidamos al Santo
Cristo de Ourense por nuestras intenciones y por las intenciones de toda la
Iglesia (breve silencio).
Oración:
Oh Dios, que quisiste que tu amantísimo Hijo sufriese por
nosotros el suplicio de la Cruz para arrojar de nosotros la tiranía del
enemigo, oncédenos a tus siervos, conseguir la gracia de la Resurrección. Por Cristo Nuestro Señor. Amén.
En
este segundo día de la novena escuchamos las palabras de Jesús: “vosotros sois
la sal de la tierra”, “vosotros sois la luz del mundo”. Debemos empeñarnos en
iluminar las realidades de nuestro mundo con la luz del amor de Dios
manifestado en Cristo. Preguntémonos cada uno: ¿cómo puedo iluminar mejor la
vida de los que tengo al lado?
Del Papa Francisco. E.G. 20, 21, 23:
La alegría del Evangelio que
llena la vida de la comunidad de los discípulos es una alegría misionera.
Esa alegría es un signo de que
el Evangelio ha sido anunciado y está dando fruto. Pero siempre tiene la
dinámica del éxodo y del don, del salir de sí, del caminar y sembrar siempre de
nuevo, siempre más allá.
Fiel al modelo del Maestro, es
vital que hoy la Iglesia salga a anunciar el Evangelio a todos, en todos los
lugares, en todas las ocasiones, sin demoras, sin asco y sin miedo. La alegría
del Evangelio es para todo el pueblo, no puede excluir a nadie
“Por
tu pasión y muerte en cruz, bendito Cristo de Ourense, ampáranos en la vida y
en la muerte”. Pidamos al Santo Cristo de Ourense por nuestras intenciones y
por las intenciones de toda la Iglesia (breve silencio).
Oración: Oh Dios, que quisiste que tu amantísimo Hijo sufriese por nosotros el suplicio de la Cruz para arrojar de nosotros la tiranía del enemigo, concédenos a tus siervos, conseguir la gracia de la Resurrección. Por Cristo Nuestro Señor. Amén.
Comenzamos
esta novena poniéndonos a los pies de Cristo crucificado; nos invita a extender
ese amor, derramado desde la cruz, a toda criatura, siendo sus testigos en el
mundo entero. Nuestra diócesis, en camino sinodal, quiere buscar nuevas maneras
de hacer llegar el amor de Dios a todos los hombres.
Del Papa Francisco. E.G. 19,20:
La evangelización obedece al
mandato misionero de Jesús: «Id y haced que todos los pueblos sean mis
discípulos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu
Santo, enseñándoles a observar todo lo que os he mandado» (Mt 28,19-20)
En la Palabra de Dios aparece
permanentemente este dinamismo de «salida» que Dios quiere provocar en los
creyentes. Abrahán aceptó el llamado a salir hacia una tierra nueva (cf. Gn
12,1-3). Moisés escuchó el llamado de Dios: «Ve, yo te envío» (Ex 3,10), e hizo
salir al pueblo hacia la tierra de la promesa (cf. Ex 3,17).
Hoy, en este «id» de Jesús,
están presentes los escenarios y los desafíos siempre nuevos de la misión
evangelizadora de la Iglesia, y todos somos llamados a esta nueva «salida»
misionera. Cada cristiano y cada comunidad discernirá cuál es el camino que el
Señor le pide, pero todos somos invitados a aceptar este llamado: salir de la
propia comodidad y atreverse a llegar a todas las periferias que necesitan la
luz del Evangelio.
“Por tu pasión y muerte en cruz, bendito Cristo de Ourense, ampáranos en la
vida y en la muerte”. Pidamos al Santo Cristo de Ourense por nuestras
intenciones y por las intenciones de toda la Iglesia (breve silencio).
Oración:
Oh Dios, que quisiste que tu amantísimo Hijo
sufriese por nosotros el suplicio de la Cruz
para arrojar de nosotros la tiranía del enemigo,
concédenos a tus siervos, conseguir la gracia de la
Resurrección.
Novena ao Santo Cristo de Ourense. Coma sempre, do 25 de abril ao 3 de
maio. Predica a novena o M. I. Sr. D. José Ángel Feijoo Mirón, secretario do
Cabido catedralicio e reitor do Seminario do Divino Mestre. Un ano máis tódolos
devotos do Santo Cristo somos convidados a participar nesta solemne novena. O
Santo Cristo agárdanos paciente e misericordioso na súa capela da catedral de
Ourense.
Non pensemos en idades, en razas, en estratos sociais, en ideoloxías, en
maneiras de pensar, en crenzas ou non crenzas. Para todos hai un recuncho no
Santo Cristo: para pensar, para reflexionar, para rezar, para contemplar, para
soñar, para repensar a propia vida… A Deus gracias, a capela do Santo Cristo
acolle a todos e ninguén dos que se achegan van a ser defraudados. Igual
pensades que intento liarvos; non é certo, vinde, vede e vivide a experiencia.
O Santo Cristo de Ourense coñécenos a todos e para todos ten unha mensaxe de
amor e tenrura.
Ca novena do Cristo abrimos as portas a tódalas grandes novenas de Ourense
cidade: Virxe de Fátima, María Auxiliadora, Corazón Eucarístico,San Barnaba, San Antonio... Haberá misas
dende as 8 da mañá ata as 12,con confesores dispoñibles. Pola tarde Santo
Rosario as 18.00 e as 18.30 misa solemne da novena para terminar as 20.00 ca
última misa.
Ao longo de estes días podemos renovar a pertenza a cofradía do Cristo, que
é unha das máis numerosas da diocese, chegando a ter 1300 cofrades. Tódolos
meses, ao longo do ano, celébranse misas polos defuntos e pídese polas
intencións de todos los devotos do Santo Cristo.
Tres siglos después de su fundición, las campanas de la catedral de San Martiño de Ourense (siglo XI) siguen sonando y dando puntualmente las horas, las medias y los cuartos. A partir del día 24, y coincidiendo con el inicio de la novena en honor al Santo Cristo, el más popular morador de la seo ourensana, las campanas seguirán repicando, pero ya a través de sistema digital, controlado desde un ordenador central y con las campanadas programadas por periodo de un año, incluido cambio de hora automático. Las nuevas tecnologías se ponen también al servicio de la fe.
La catedral de San Martiño de San Martiño se pasa la era digital. Aprovechando las obras de renovación de su instalación eléctrica, "muy deteriorada" , explica el deán catedralicio, José Pérez Domínguez, se está instalando estos días un nuevo sistema monofásico y controlado por ordenador, de las campanas de la catedral.
"Las campanas de la catedral, casi desconocidas para los ciudadanos por su ubicación tan elevada, tienen protección de Patrimonio, llevan siglos tañendo para anunciar con sonidos diferentes horas, medias cuartos, las horas de coros, del Angelus y muchas otras, pero lo hacían a través de un sistema rudimentario, que además estaba dañando su estructura, pues el badajo interior era de hierro", explica el deán catedralicio.
La obra que realiza una empresa especializada de ámbito nacional, "incluye la sustitución del martillo interior de hierro, que estaba dañado el interior de las campanas por otro de bronce, y además estamos eliminando el sistema trifásico eléctrico muy costoso de mantener y rudimentario por el monofásico, controlado a un ordenador central que queda programado por un año y cambia automáticamente aunque haya cambio de horas" explica José Pérez Domínguez. La figura del sacristán controlado los tiempos del anterior mecanismo, desaparece.
El deán puntualiza que "no es música digital, serán las mismas campanas, pero tañerán controladas desde el ordenador que brinda tantas posibilidades que pondríamos hacer sonar al ritmo de cualquier canción" indica.
Campanadas de 9 a 20 horas
La periodicidad será la misma que en la actualidad y las campanas seguirán sonando de 9 de la mañana 8 de la tarde "y manteniendo el mismo nivel de decibelios para respetar el descanso de los ciudadanos", explica el deán.
Estas campanas que llevan acompañando con sus repiques, distintos según se toque q a coros, a difunto o se anuncie la llegada de un nuevo obispo, son físicamente desconocidas por su ubicación.
Si alguien ha contando con esmero del periodista y el historiador experto la vida de estas campanas es Jesús Manuel García, en su blog donde nos dice hasta sus nombres . "Son siete: Mayor, Segunda, Pote, Prima, Solemne, Prima Diario, Nueva, Bartolomé y Martín. Están colocadas dos a dos en cada una de las cuatro fachadas del cuerpo correspondiente de la torre". Y aún añade el experto que la campana mayor "tiene un peso de 1.155 kilos y su diámetro es de 1,45". Con nombre propio y frases grabadas en su "piel" de bronce, no es de extrañar que sepan dar las horas cada día.
La Catedral automatiza y afina sus campanadas
Una empresa murciana ultima esta semana la modernización del sistema
Técnicos de la empresa Tradición en Relojes y Campanas -con sede social en Murcia- están llevando a cabo estos días "la revisión y tratamiento de los yugos de madera de las campanas, que llevan tiempo sin ser atendidos", explica Francisco Carretero, responsable de los trabajos.
A esto se añade la electrificación de las campanas con una nueva central de mandos automatizada y unos martillos adecuados a cada campana, con unas bolas de bronce adecuadas tanto en dimensiones como en resistencia "para que el sonido sea más dulce", subraya Carretero. En la fabricación de estos nuevos badajos, elaborados en bronce, se ha empleado "aproximadamente una semana para las ocho campanas", apuntan desde la empresa encargada de la obra.
Cada campana lleva su electromazo adecuado y todos van conectados a una "central autómata que estará situada en la sacristía y desde donde se determinarán todos los redobles de campana", indica Carretero. Junto a esta remodelación se ha abordado la restauración de la esfera del reloj -que permanecía parado hasta ahora-, incorporando también la automatización, además de un nuevo sistema de iluminación LED.
¿Por qué doblan las campanas de la catedral?
La Voz de Galicia en Ourense
Una empresa instala un nuevo sistema eléctrico para adecuar y dulcificar su toque
Un sistema eléctrico hará más dulce el son de las campanas de la catedral
Durante estos días tocarán más que nunca, a distintas horas. No será por entierros, alarmas, misas diarias o por las ánimas. Pero deben aprovechar, parar y disfrutar. Las campanas de la catedral de Ourense se renuevan o, mejor dicho, se adaptan a los tiempos. Trabajadores de la empresa murciana Tradición en Relojes y Campanas obran estos días en uno de los rincones con más historia de la ciudad con el objetivo de instalar un nuevo sistema eléctrico que adecuará y dulcificará -sin perder su esencia- el repique de toda una ciudad. No solo eso, también revisan los yugos y el ajuste de la madera, tratando estas zonas con su color original, almagre (rojo de hierro) a poro abierto, para que estén más protegidas de las inclemencias del tiempo.
Pero la parte más importante tiene que ver con el sonido. Aunque los edificios culturales y monumentos como la Catedral de Ourense, con más de cien años de historia, no tienen que adecuar sus decibelios a la normativa de la ciudad, sí que se pretende tamizar su toque. No tanto para cambiarlo sino como consecuencia de su arreglo, ya que el estado de deterioro de los badajos transmitía un eco no acorde con su sonido original. «El badajo se queda, pero acoplamos un electromazo que es el que golpea la campana. Se ha elegido este porque se le puede acoplar una bola de bronce, que lo que va a hacer es un toque más dulce sobre la campana y el sonido será más agradable. Así sacaremos el sonido real de todas y cada una de las campanas de la catedral», explica Francisco Carretero, de Tradición en Relojes y Campanas, encargada de las obras. Permitirá, aunque parezca contradictorio -al cambiar badajo por electromazo-, que se aproveche el sonido real del bronce: «Antiguamente el martillo golpeaba muy muy fuerte con una bola de hierro y hacía un sonido propio, pero con una bola de bronce es más adecuado. El toque será más amortiguado y no tendrá tanto estruendo».
que concluyan los trabajos, que se prevé no se alarguen más de dos días, las campanas de la catedral estarán atomizadas e informatizadas. Esto quiere decir que se tocarán desde una central de mando (un ordenador) y también a través de Software que puede comunicar con ese ordenador. «Una vez que queda todo instalado, lo que hacemos es recuperar los toques, informatizados, con la misma tradición de orden y ritmo que tenían antes. Se hace un programa inicial en el que se indica el tipo de campana y el ritmo que va a llevar y lo ejecuta cuando se le dice. Un sistema moderno pero respetando el toque tradicional», explica Carretero. La instalación de este sistema eléctrico también ha servido para comprobar el estado en el que se encuentran las campanas de la catedral ourensana. «El bronce está en un estado óptimo, muy bueno. Pero lo que es necesario cambiar, que se tendrá que hacer en un proyecto posterior, es el yugo. Necesita una intervención, porque lleva mucho tiempo sin cuidarse y si a la madera no la cuidas se va deteriorando», afirma el experto.
Tres trabajadores se enfrentan a la ilusionante misión de hacer historia a 40 metros sobre el suelo. Todas las medidas de seguridad son necesarias, como para cualquier otro trabajo en altura, pero en este caso aún más, si se tiene en cuenta que en sus manos, además de toneladas de kilos, hay muchos siglos de historia. La suerte ha sido, y de esto saben mucho estos trabajadores, el cambio en la meteorología. Quizás el sol se ha aliado para el arreglo de las campanas o el buen tiempo lo han traído de tierras murcianas.
Las vistas desde la torre de las campanas son espectaculares, tanto de puertas para afuera, las de la ciudad, como las interiores, las de las ocho campanas, inventariadas por el Ministerio de Cultura. El Gremi de Campaners, que cataloga en España todos estos instrumentos, habla de la importancia de estas ocho campanas litúrgicas -en la catedral hay dos más, las del reloj- y explica que las dos más antiguas datan de 1780. Sobre su estado destacan: «Debe repasarse la mayoría de los mazos motorizados, que se bajaron y golpean la campana correspondiente con riesgo de rotura inmediata. La propuesta global pasa por recuperar los toques propios de esta Catedral, protegiendo las campanas litúrgicas, situando las rejas por delante y no por detrás».
Parte de este trabajo ya lo está haciendo Tradición en Relojes y Campanas, que se dedica a su restauración, instalación y electrificación. Con experiencia en toda España e incluso en Hispanoamérica, este no es su primer trabajo en Ourense. El contacto con la catedral ourensana surgió a raíz de un trabajo que realizaron el año pasado en el Mosteiro de San Clodio, en el concello de Leiro. «Restauramos un reloj interior del siglo XVII, que no tiene esfera a la calle. Nos llevamos una pieza y precisamente esta misma semana iremos hasta allí para montarla», relata Francisco Carretero.
Desde lo alto de la ciudad de Ourense se esperan renovados toques de campanas que, aunque puedan pasar desapercibidos para muchos de los ourensanos que transitan por el casco viejo de la ciudad, serán a partir de esta semana los que acompañen a las generaciones venideras.
En
la S. I. Catedral Basílica de San Martín tendrá lugar la novena al Santo Cristo
Sagrada Familia
·Del 25 de abril al 3 de mayo.
·Con celebración de la Eucaristía desde las 8.00 de la mañana hasta las
20´00 horas.
·Con confesiones antes de cada Eucaristía.
·Ejercicio del Santo Rosario a las 18.00 horas.
·Solemne novena y Santa Misa a las 18´30 de la tarde. Predica D. José
ángel Feijoo Mirón, Canónigo Secretario del Cabildo y Rector del Seminario
Mayor Divino Maestro.
·Día 3 de mayo, fiesta del Santo Cristo de Ourense. Presidirá la
Eucaristía de las 6.30 de la tarde el Sr. Obispo, D. Leonardo Lemos Montanet.
·Momento oportuno para la renovar la pertenencia a la Cofradía del Santo
Cristo de Ourense y para la incorporación de nuevos miembros a la misma (Se
celebra una eucaristía mensual por las intenciones de los Cofrades del Santo
Cristo y también por el eterno descanso de los Cofrades difuntos).
¡Por
tu pasión y muerte de cruz, bendito Cristo de Ourense, ampáranos en la vida y
en la muerte!
El Ejercicio de la Novena al Santo Cristo de Ourense será transmitido por Radio
Ourense a las 13.00 horas.
En la
página web de la catedral aparecerá el tema de cada día de la novena.
La muerte quiso devorar a Jesús, como había hecho hasta entonces con todos
los seres humanos caídos bajo su dominio. Jesús bajó a los infiernos, al reino
de los muertos, de donde nadie había vuelto. Y la muerte fue vencida en su
propia madriguera.
La resurrección de Jesús es el estallido de vida, la luz que resplandece en
la oscuridad, el punto de inflexión que conmociona la historia de la humanidad.
Del dominio del pecado, que conduce a la disgregación y a la disolución de
todo, al poder de la gracia que lo recapitula todo en Cristo.
La Palabra de Dios, tan abundante en la Vigilia Pascual, nos invita a
releer la historia de la humanidad y nuestra historia personal en clave de
historia de salvación.
La liturgia bautismal y la eucaristía nos ofrecen la
participación sacramental en la vida nueva de Jesús. Por esto hoy cantamos un
aleluya que nos sale del alma y que se prolonga en el anuncio gozoso que hemos
de proclamar por todas partes, y que de hecho es el núcleo del evangelio:
¡Cristo ha resucitado! ¡Felices pascuas para todos!